miércoles, 21 de octubre de 2015

Cartas a Diego II


Géminis en enfoque automático.

Culpo a la miopía de mis sentimientos que de alguna forma elevo mis brazos, y con la brisa en demora, te cuenta sin pudor todos mis secretos.

Y es que con tantos giros en estas manecillas he notado levemente cómo las hojas regresan a su ramo y yo me quedo con la incertidumbre de saber si éstas columnas siguen de pié
Que el diablo frecuenta soledades y nostalgias, y las amarguras llenas de pena se dilatan sobre las sábanas. Es ese el momento en donde la angustia me mueve de piedra a humo entre los recuerdos. Entre las distancias.

Que te extraño, carajo. Te lo digo desnudo porque a pesar de haberlo estado siempre, la brisa es fría y pesada.

martes, 13 de octubre de 2015

Cartas a Diego I

Delgado de luna mía

Cómo me gusta mirarte a los ojos,
cómo me gusta quizá inventándolo desde
mis adentros, que tus ojos
sonríen cuando los veo,
como un efecto de espejo
y no de espejismo,
me invento mil razones
pero sé que la más importante
es la que confirmo
cuando sonreímos
al mismo tiempo.

Cuando me doy cuenta
que la fascinación arde
como fuego de noche
y se extiende
en nuestras manos.

Chingado
que desde que dormimos juntos
no paro de soñar despierto
y me llamo a mi mismo
lunático
pero en verdad exclamo
que al acostar mi somnolencia
en tu espalda,
la luna
se vuelve almohada.